La ducha adaptada

Llegas a casa y lo primero que te apetece es llenarte la bañera hasta arriba y darte un baño calentito para relajar todos los músculos de tu cuerpo. Los vapores calientes que llenan los cristales de vaho son una delicia, y, sentir cómo la superficie se mueve sobre tu piel, es todo un verdadero deleite.

Pero no todos pueden permitirse el lujo de tener una bañera, porque no todas las personas son capaces –ya sea por impedimento físico, de edad o mental– de levantar la pierna y de meterse dentro de una bañera. Para ellos, la hora del baño es un verdadero suplicio.

 

¿Bañera o ducha? Una difícil realidad para las personas impedidas

Si nos basamos en las estadísticas, podemos apreciar que el número de personas que tienen movilidad reducida en nuestro país es verdaderamente alarmante. Pero, ¿de verdad es eso lo único que influye? Porque también existen personas ancianas en España que tienen cada vez más dificultades para levantar las piernas, por no hablar de los pobres discapacitados psíquicos que necesitan ayuda diaria en sus quehaceres habituales y rutinarios.

Tú imagínate lo que sería para ti, si estuvieses al cuidado de tu madre o de tu padre anciano, tener que levantarlo de la cama o de la silla, llevarlo hasta el baño y tener que meterlo como puedas en la bañera, ¡con el riesgo que eso conlleva para ellos!

Porque, si son personas con movilidad reducida leve, podemos encontrarnos casos de personas a las que solo tengamos que darles la mano para procurarles un apoyo. Pero, ¿qué sucede si nos encontramos con el caso contrario, una persona vegetativa de cintura para abajo que no pueda ni siquiera ponerse en pie? ¿O de cuello para abajo? Porque estos ni siquiera pueden mover ni una sola parte de su cuerpo, a excepción de la cabeza.

 

Antes que nada, hablemos de cómo adaptar la bañera

Una posible solución es adaptar tu bañera para que sea más sencillo para ti poder asear a esa persona que depende de ti, o de la enfermera que va a cuidarla.

Tienes varias opciones:

  • Puedes usar una grúa. Hay personas que compran una grúa para poder posicionar a la persona y poder moverla.
    • ¿Pros? Es una buena solución.
    • ¿Contras? No es una solución muy económica, que digamos…
  • Sillas o tablas de madera. También puedes poner sillas o tablas de madera para que la persona se siente y no tenga que estar haciendo equilibrio.
    • ¿Pros? Es una solución que, a la larga, nos puede venir bien.
    • ¿Contras? Puede ser algo peligroso. Supongo que la silla se tambalea o que la tabla de madera, debido al agua, se escurre. La persona discapacitada podría llegar a hacerse daño.
  • Revierte el baño con una capa antideslizante. Esto viene bien para personas mayores, porque no están impedidas pero pueden resbalarse. Con esto, evitarás un disgusto.
    • ¿Pros? Es una buena solución.
    • ¿Contras? Ninguno, es una buena medida preventiva.
    • Barandillas de metal. De nuevo, lo mejor para los ancianos. Gracias a ellas, las personas solo tienen que agarrarse a las barandas para no caer y poder asearse con total independencia. Pero no los dejes solo por eso, o, igualmente, podrías llevarte un buen disgusto.
    • ¿Pros? Ideal para los ancianos.
    • ¿Contras? Ninguno, es una buena medida preventiva.

 

Sin embargo, hay una solución que es todavía mejor

¡La ducha! ¿Cómo que por qué?

Vamos a pensar, antes que nada, en su morfología: la bañera tiene una forma ovalada con paredes que has de pasar para acceder a su interior, por lo que cualquier persona va a tener que levantar la pierna para poder bañarse a gusto. Eso complica MUCHO las cosas para una persona de movilidad reducida o anciana.

Las placas de ducha, en cambio, son totalmente planas y no tienes que traspasar ningún muro, ¡porque tan solo es un suelo con una mampara deslizante para abrir y cerrar la puerta! Esto ayuda a que tanto la persona como al cuidador a que la hora del aseo sea mucho más fácil y segura.

¿Te has parado a pensar en que, con una ducha, introducir una silla que se mantenga estática es mucho más sencillo? O en lo fácil que es adaptar una ducha a personas con movilidad reducida.

Actualmente, estos expertos en  cambiar bañera por plato de ducha en Valladolid, trabajan para cambiar las bañeras de tu hogar por placas de ducha totalmente adaptadas a personas con baja movilidad, de una forma limpia y segura y con materiales de primera calidad, lo que nos asegura mayor seguridad para nuestros ancianos.

 

Si tienes una persona a tu cargo que está impedida de alguna forma, lo más seguro para ella es adaptar una placa de ducha, ya que esta te dará mejor movilidad a ti para poder manejarla sin ponerla en peligro.