El sorprendente avance de los implantes de carga inmediata.

Implante de carga inmediata.

La implantología de carga inmediata es una novedosa técnica de cirugía dental que permite restaurar una boca y colocar la prótesis el mismo día que se instala el implante dental, cuando antes había que esperar meses.

Colocar un diente o un conjunto de dientes artificiales para restaurar la apariencia y operatividad de la boca requiere de dos fases claramente diferenciadas. La primera de ellas es la colocación del implante. Esta es la parte más importante. El implante es un apósito, generalmente de titanio, que sustituye a la raíz del diente perdido y que es el que va a soportar la presión ejercida sobre el diente artificial en las acciones cotidianas como el masticado. Para que el implante no se caiga con el tiempo y el diente postizo tenga solidez, el implante debe integrarse en la estructura maxilofacial del paciente. La segunda fase es la colocación de la corona o prótesis. Esta solo es posible cuando el implante está integrado completamente en la boca y las hendiduras abiertas para colocarlo han cerrado y cicatrizado.

Por lo general, hay que esperar entre 3 y 6 meses desde que se instaló el implante hasta que se coloca la prótesis. En este periodo se produce la osteointegración. Es decir, el implante se suelda molecularmente, de manera natural, con la estructura maxilofacial del paciente, como si formara parte de la misma.

Hoy, con la implantología de carga inmediata, no es necesario esperar todo ese tiempo. El mismo día que se coloca el implante, el paciente puede regresar a su casa con una prótesis provisional que le permite recuperar la funcionalidad de la boca sin comprometer la integración del implante.

Esto es posible gracias a que la prótesis provisional descarga la tensión sobre la encía y no sobre el implante. Esta medida, además, protege y acelera la osteointegración. Ya que el implante queda protegido por la corona provisional.

Los cirujanos orales de Médico Dental SM, una red de clínicas dentales presentes en la provincia de Jaén y en Madrid Capital, con más de 30 años de experiencia en la salud dental y pioneros en nuestro país en la utilización de técnicas punteras como Palma System, dicen que con la implantología de carga inmediata se puede restaurar una arcada completa en un solo día, cuando esto antes era materialmente imposible.

Conozcamos mejor los beneficios y la aplicación de esta técnica.

Los grandes beneficios de los implantes de carga inmediata.

La revista Crónica Global señala que uno de los aspectos más interesantes de la implantología de carga inmediata es que sus beneficios los percibe el paciente desde el primer día. Pero para comprender lo revolucionaria que es esta técnica, lo mejor es detenernos uno a uno en estos beneficios. Los más destacados son:

  1.  Función  masticatoria y estética recuperada al instante. Los pacientes pueden volver a masticar y sonreír el mismo día de la colocación del implante, evitando tener que pasar por un periodo sin dientes.
  2. Menor duración del tratamiento. A diferencia del proceso convencional, que puede durar varios meses, este método acorta significativamente el tiempo de tratamiento. De entrada, el mismo día, el paciente llega a casa con la boca restaurada. Este método es ideal para quienes buscan una solución rápida.
  3. Aumento de la autoestima. Al evitar la incomodidad de estar sin dientes visibles o con prótesis removibles, los pacientes experimentan una mejora inmediata en su confianza y bienestar emocional.
  4. Mayor comodidad. Este procedimiento es menos invasivo que los implantes tradicionales, ya que se requiere una única intervención quirúrgica, reduciendo así el número de visitas al dentista.
  5. Mejor integración del implante. Como ya hemos señalado antes, la carga inmediata favorece la osteointegración, es decir, la fusión del implante con el hueso, ya que se aplica una carga funcional desde el principio.
  6. Prevención de la pérdida ósea. Al colocar el implante y la prótesis rápidamente, se estimula el hueso, lo que ayuda a prevenir su reabsorción, algo que ocurre cuando se pierde un diente.
  7. Resultados estéticos mejorados. Al realizar el procedimiento, poco después de la extracción dental, se conservan mejor los tejidos blandos, como las encías, logrando un aspecto más natural.
  8. Menor riesgo de recesión de las encías. La pronta colocación de los implantes ayuda a mantener la forma natural de las encías, reduciendo la posibilidad de que retrocedan, algo que puede suceder con los tratamientos tradicionales.

Cómo se aplica el tratamiento.

El tratamiento de carga inmediata comienza con una evaluación inicial, donde se realiza un análisis exhaustivo de la salud bucal del paciente. El dentista lleva a cabo un examen clínico para revisar la calidad del hueso en la zona destinada al implante y confirmar la viabilidad del procedimiento. Además, se valoran otros aspectos importantes como el estado general de la boca y el historial médico del paciente, lo que permite tener una visión integral de su salud antes de iniciar el tratamiento.

En los casos donde existan dientes dañados, restos dentales o fracturas en la zona del implante, el siguiente paso es proceder con las extracciones que sean necesarias. Luego, se prepara el área mediante una perforación precisa en el hueso maxilar, con el fin de crear una base estable para colocar el implante. Este proceso es fundamental para asegurar que el implante cuenta con un soporte adecuado en el hueso.

Una vez que el sitio está preparado, se inserta el implante dental, que es una pequeña estructura de titanio colocada quirúrgicamente en el hueso. Este implante actúa como una raíz artificial para el futuro diente de reemplazo. Su colocación se realiza con precisión, y para asegurar su correcta ubicación se utilizan radiografías que permiten verificar que todo esté en su lugar de manera adecuada.

Tras la colocación del implante, se coloca una prótesis provisional de forma inmediata o dentro de las primeras 24 a 48 horas. Esta prótesis tiene tanto un valor estético como funcional, permitiendo al paciente masticar y sonreír con normalidad mientras el implante se fusiona con el hueso. En algunos casos, si las condiciones óseas son favorables, se puede optar por la colocación de una prótesis definitiva desde el principio, lo que acelera aún más el proceso de recuperación.

Una vez concluida la operación, es importante seguir las indicaciones del implantólogo respecto al posoperatorio. Es posible que para reducir el riesgo de infección o para calmar el dolor, el facultativo recete al paciente algunos medicamentos. También dará instrucciones sobre la dieta, en la que en un principio se prescindirá de alimentos duros.

La higiene dental será importante en este proceso. Para ello, el paciente deberá cepillarse los dientes con suavidad y completar la higiene con el uso de un enjuague bucal recomendado.

Es importante acudir a las visitas de seguimiento que marque el especialista, puesto que aunque hayan instalado unos implantes de carga inmediata, debe asegurarse de que se integran adecuadamente y que no aparecen complicaciones.

Casos en los que no se puede aplicar esta técnica.

Aunque hemos visto que la implantología de carga inmediata supone un importante avance, no todo en este tratamiento es maravilloso. El Colegio Higienistas de Madrid, en su revista digital, advierte que existen determinados casos en los que no es aplicable esta técnica o, en los que, al menos, no es recomendable. Son los siguientes:

  • Enfermedades periodontales graves. A las personas que tienen enfermedades en las encías graves, como puede ser una periodontitis bastante avanzada, no se le puede aplicar los implantes de carga inmediata. Ya que en este caso, la prótesis provisional descansa sobre la encía y no sobre el implante. Si la encía está dañada, no podrá soportar la presión y se puede agravar la enfermedad produciendo nuevas heridas en infecciones.
  • Algunas enfermedades de salud general. Ciertas enfermedades crónicas como la diabetes hacen desaconsejable esta técnica, ya que esta enfermedad afecta al sistema inmunológico, provocando que los resultados no sean los esperados.
  • Falta de masa ósea suficiente. Para colocar cualquier tipo de implante dental, incluidos estos de carga inmediata, es necesario que exista una masa ósea suficiente para que el implante se pueda soldar. Si la masa ósea es insuficiente, no es adecuado aplicarlo. Más vale regenerar el tejido óseo antes o colocar un injerto de hueso, y esperar el tiempo necesario para proceder al inicio del tratamiento.
  • El Tabaquismo. El tabaquismo es desaconsejable para cualquier tipo de implantología. El humo del tabaco crea un ambiente tóxico en la boca que favorece la infección de cualquier implante que se coloque. Si un fumador está pensando en colocarse un implante dental, esta es una buena oportunidad para que se plantee dejar de fumar.

Es importante subrayar que para iniciar el tratamiento es necesario efectuar una revisión detallada y exhaustiva de la salud dental del paciente. El implantólogo deberá analizar si el paciente dispone de una densidad y cantidad de hueso suficiente, así como del estado general de la boca. Si el paciente no reúne las condiciones adecuadas, más vale recurrir a los métodos tradicionales.

Aun así, podemos decir que los implantes de carga inmediata son un avance importante y que se trata de un procedimiento seguro.