La palabra « sexting » procede de las palabras inglesas «sex» (sexo) y «texting» (enviar mensajes). Esta práctica consiste en enviar mensajes con contenido erótico a través de dispositivos tecnológicos de manera voluntaria.
Pueden ser fotos, mensajes, audios o vídeos. España se posiciona como uno de los países en los que más se practica el «sexting», extendido igualitariamente entre hombres y mujeres en el caso de mensajes.
Sin embargo, en el caso de las fotografías, los hombres son mucho más activos, ya que cuatro de cada cinco se han hecho fotos de contenido erótico, pero en el caso de ellas son una de cada cuatro las que se atreven a enviar fotos íntimas.
Desde hace varios años, esta práctica sexual se va extendiendo entre los jóvenes gracias a las redes sociales, pero se trata de una práctica de alto riesgo .
Casi un 10% de los jóvenes de entre 10 y 16 años han recibido fotos íntimas. El riesgo viene cuando el que las recibe decide difundirlas entre amigos o colgarlas en internet.
«Los canales de comunicación de hoy en día permiten un intercambio rápido de imágenes o vídeos , provocando que muchos de estos datos pierdan su privacidad e incluso lleguen a manos de extraños», recoge un informe elaborado por la firma de seguridad Kaspersky Lab.
Ese contenido erótico puede ser filtrado en internet, llegando incluso a publicarse en páginas web pornográficas.
«Aunque los padres tengan conocimientos de internet y puedan ayudar a sus hijos en algunos aspectos, el comportamiento de los adultos con este medio es diferente al de los niños, el problema no es la falta de conocimientos tecnológicos sino la falta de información sobre la relación de los niños con las tecnologías, cómo utilizan las redes sociales, que riesgos corren, para que utilizan las tecnologías», dice Alfonso Ramírez , director general de Kaspersky Lab Iberia.
El comando británico de explotación infantil y protección en línea CEOP, informa que «existen miles horas de grabación de webcams de chicas británicas publicadas en webs de pornografía infantil».
«Por tanto, cualquier caso de ciberacoso es denunciable y no sólo tendríamos que hacerlo a través de la plataforma en cuestión, sino que debemos hacérselo saber a las autoridades pertinentes, como a la Brigada Central de Investigación Tecnológica o BIT de la Policía Nacional (091), quien se encargará de investigar y perseguirá a los delincuentes», explican desde El Mundo.
Riesgos del «sexting»
Extorsión: Las personas que reciben este contenido erótico pueden amenazar con reenviarlo a cambio de dinero.
Viralización: Muchos mensajes privados han sido difundidos en Internet. La difusión de este contenido constituye un delito.
Edad: La psicóloga Emma Ribas, especializada en sexología, explica que los menores de edad se introducen en el mundo del sexo a través de las redes sociales construyéndose una imagen distorsionada de la sexualidad.
Suplantación de identidad: En las aplicaciones es muy fácil hacerse pasar por menores, por lo que se puede enviar información íntima a desconocidos.
Consejos para evitar el ‘sexting’
-No intercambies fotografías íntimas.
-No envíes contenidos privados.
-No bromees con este tipo de imágenes o vídeos.
-No publiques fotos íntimas en las redes sociales.
¿Qué hacer si descubres que a tu hijo le han pedido que envíe una foto íntima por el móvil?
Si tu hijo te cuenta que ha enviado una foto íntima, debes mantener la calma y obtener la máxima cantidad de información posible.
Es importante saber el/la destinatario/a de las fotos o videos, si surge una situación de chantaje por la otra parte, si se tiene conocimiento de las posibles consecuencias de realizarlo, etc
Es necesario aclarar que no debe ceder ante las insistencia de terceros y enviar contenido erótico.
Pero si te enteras de que tu hijo ha enviado una foto, lo mejor es hablar del tema directamente, con naturalidad y calma.
Si la otra parte es otro menor, lo mejor es obtener toda la información posible, es decir, si forma parte de su círculo social próximo y si los envíos son exigidos bajo chantaje, coacción o acoso.
En este caso, se puede poner una denuncia y también informar a los padres de la otra parte para que sean conscientes de la situación. Pero si los envíos fueran consentidos, puedes explicarle los riesgos y consecuencias del ‘sexting’.
Si la otra persona es un adulto, lo mejor es tomar una captura de pantalla del chat con las peticiones de envío de imágenes, y acudir a las autoridades para realizar una denuncia.
¡Es importante que los adolescentes conozcan el riesgo de esta práctica para que no envíen ni suban contenido erótico!